Review: Artillery - “The Face Of Fear” (Metal Blade 2018)
El pasado viernes 16 de Noviembre la banda danesa de Thrash Metal Artillery, una de las más populares de este género en el continente europeo, sacó a la luz un nuevo trabajo titulado “The Face Of Fear”, lo que se ha convertido en su noveno disco de estudio, bajo la firma discográfica Metal Blade Records. El grupo, con una larga trayectoria en el mundo de la música metal, lleva desde 1982 otorgándonos discos contundentes y haciéndose hueco en el panorama del Thrash Metal europeo. En este caso nos disponemos a comentar brevemente las canciones que forman el repertorio de "The Face of Fear".
El disco comienza con la canción que da título al álbum, “The Face of Fear” se trata de un tema que, al igual que ocurre habitualmente con los discos de Thrash Metal, introduce de manera potente y veloz lo que van a ser 45 minutos de disfrute metalero. No obstante, uno de los aspectos que más llaman la atención de esta pieza es que el estribillo es de hecho bastante melódico, la aguda voz de Michael Bastholm Dahl combinada con la progresión de acordes de esta parte de la canción hace que nos recuerde incluso a un tema con toques épicos más relacionados con el Power Metal. Una combinación curiosa y que no defrauda en absoluto, pues es una canción muy completa en todos los sentidos.
La segunda canción, titulada “Crossroad to Conspiracy” sigue en la línea de lo que propone su predecesora. Con una duración algo más larga y renunciando en este caso a los matices épicos que se dejaban ver en “The Face of Fear”, este segundo tema es potente y aunque juega un poco más con los cambios de ritmo, continúa con los tempos acelerados a los que tan acostumbrados nos tienen las bandas de este género.
Llegamos pues a la tercera pieza del álbum y nos encontramos con “New Rage”, una canción que de hecho empieza con un sonido de guitarra acústica y la voz de Bastholm Dahl casi como si se tratase de una balada, pero eso ocurre sólo durante un corto periodo de tiempo hasta que vuelve la distorsión y entra el resto de la banda. El tema rebaja un poco el ritmo con respecto a los dos primeros del álbum y vuelve a mostrar ciertos fragmentos de gran despliegue melódico como es el caso del estribillo o los solos.
“Sworn Utopia” es la cuarta canción del disco. Thrash/Speed metal auténtico y genuino. Suena de hecho casi como una canción thrashmetalera de los años 80 con la producción de sonido actual. Muy cercana a lo que podríamos encontrarnos en un trabajo de Megadeth.
Pasamos a una canción con un tempo algo menos acelerado y que nuevamente nos puede producir un feeling muy clásico y ochentero. “Through the Ages of Atrocity” marca el ecuador de este disco y nos hace mover la cabeza al ritmo alegre pero no desenfrenado de sus riffs guitarreros y también disfrutar del medio tiempo de los estribillos. Algo similar ocurre con la siguiente "Thirst for the Worst", canción algo menos poderosa, pero que no rebaja en absoluto la actitud que pretende transmitir el álbum.
“Pain” es el título de la séptima canción. Al igual que ocurre con “New Rage”, empieza con un sonido limpio de guitarra y una voz muy melódica, al estilo de una balada, pero en este caso esta sensación se mantiene a lo largo de toda la pieza. No es ni mucho menos una Power Ballad amorosa, pero el tono melancólico está muy presente e incluso el final de la canción suena como si el final de una balada se tratase. Cuenta además con un videoclip, el cual fue lanzado el 8 de noviembre por Metal Blade Records, apenas unos días antes del lanzamiento oficial del disco completo.
La octava canción es una breve pieza instrumental llamada “Under Water”. Una obra lenta y pesarosa, con un sonido acuático de fondo y alternancias entre guitarra limpia y guitarra solista en una melodía constante que casi parece estar introduciendo la siguiente canción. “Preaching to the Converted” hace que el álbum regrese a la agresividad y la velocidad de los temas del principio, esta es de hecho probablemente la canción más cruda del álbum y es un subidón de adrenalina de principio a fin.
El disco cierra con dos temas regrabados como décima y undécima canción del mismo. Respectivamente se tratan de “Mind of no Return”, canción que abría el primer demo de la banda en 1982, y “Doctor Evil”, presente en un álbum mucho más cercano en el tiempo como es Legions (2013). El primero de todos resulta especialmente distinto por lo diferente que resulta escuchar una canción de principios de los 80 reinterpretada con la tecnología de grabación y postproducción musical de hoy en día.
En resumen, “The Face of Fear” es una propuesta interesante puesto que a pesar de tener un carácter marcadamente thrashmetalero, tiene ciertos matices más típicos de otros subgéneros del metal que le otorgan un cierto ritmo y que le dan a cada canción una personalidad genuinamente distinta. No se hace repetitivo y está muy bien equilibrado. Para los amantes de una besante más extrema del Thrash Metal tal vez pueda parecer un poco flojo o falto de potencia, pero desde una perspectiva más general el álbum ofrece un sonido muy disfrutable y algunos temas que, aunque tal vez no se conviertan en los más icónicos de la banda, harán las delicias de muchos apasionados de este género.
