Crónica; W.A.S.P. - La Riviera (Madrid - 23.10.2015)
El pasado viernes asistimos al concierto de W.A.S.P. que presentaban en Madrid el recién estrenado, tras casi seis años de espera, “Golgotha". Sin embargo, su último álbum de estudio no fue protagonista de la noche.
Tras la amalgama de canciones que hace de intro, saltaron al escenario con la rotunda "On Your Knees" seguida de "Inside the Electric Circus” y la cover "The Real Me" para terminar deleitándonos, tras una breve pausa, con "L.O.V.E. Machine". Un frenético comienzo que reafirmó por qué sin estar en su máximo esplendor, y a pesar de los años, W.A.S.P. sigue siendo una de las bandas referentes del heavy metal de los ’80.
"Last Ruaway” y ”Crazy”, esta última acompañada de proyecciones de músicos fallecidos como Elvis o Michael Jackson iniciaron el repaso de los temas más recientes de la banda. La actividad del bajista y la actitud del guitarrista equilibraron la pose estática pero firme de Blackie, que únicamente se movió en algún solo.
La primera gran pausa amenizada por la grabación de "Titanic Overture" dio paso a una de las canciones de su obra cumbre: "Arena of Pleasure", 
escoltada por la proyección de un nostálgico videoclip. Aunque los parones se nos antojaron excesivos, entendemos que Blackie ya no puede vender su alma al diablo y necesita un respiro para mantener la intensidad de la actuación. A continuación "Miss You", la balada de la noche, presentada como uno de los temas que se compusieron en origen para "The Crimson Idol" pero que se ha grabado finalmente en "Golgotha".
Un nuevo parón algo más corto con “Thunderhead" de fondo, para seguir con un medley de "Hellion" y "I Don’t Need No Doctor" dejando a su paso un público muy animado y que recibió, con
algo menos de interés la canción que da título a su nuevo álbum.
El primer bis de la noche arrancó y terminó con ”Chainshaw Charlie (Murders in the New Morgue)”, excesivamente sampleada pero coreada con gusto por los asistentes. Y mientras esperábamos impacientes el último bloque de la noche observando el logo de W.A.S.P. entre llamas en las pantallas, nos preguntábamos si tendríamos la suerte de poder escuchar el mítico "I Wanna Be Somebody", o si Blackie se retiraría antes de tiempo como había ocurrido en una fecha anterior. Las dudas quedaron resueltas cuando tras un "Wild Child" que llenó La Riviera de manos alzadas y gargantas desgañitadas, sonaron los primeros acordes del clásico, con el que pusieron fin a su actuación.
A pesar del poco tiempo real que la banda de Blackie Lawless está sobre el escenario y conociendo su extensa discografía, echamos de menos temas imprescindibles como “The Idol”, “Blind in Texas” o “Sleeping in the Fire”. No obstante, conciertos como el del viernes son cita obligada y disfrute asegurado.
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Fotos: Yolanda Moreno
Texto: María García
